viernes, abril 06, 2007

Caldo de neura...

Cuesta admitirlo, pero...

Estoy volviendo a cierto punto de situaciones pasadas. Quizás quienes se acuerden del Libro Rojo entenderán de lo que hablo. Son cosas que a mí me llegan más... y me hacen alejarme de la gente. Quizás es mi mente que continuamente conspira en mi contra... o quizás mi corazón.

Basta de eso...

Me lo advirtió el Marcelo, esta semana es dificil. Claro, porque trabajando en un medio católico, la semana santa debe ser muy exigente y así lo ha sido conmigo. He tenido que estar de pie en misas que han durado harto. Sacar hartas fotos y sentirme observado por mucha gente. Me carga ese sentimiento de repente, eso de pensar que soy una molestia para los curas, para los feligreces... para todos al fin y al cabo.

De todas formas estas jornadas me han hecho recordar mis antiguas experiencias en iglesias de Calama y en Pastoral de la UCN. Eran tiempos donde me sentía comprometido con una causa. Todo eso ha cambiado.

Vengo llegando del via crucis. Que lindo ver a a la gente reunirse por algo con sentido. Gente que uno percibe como buena... refugiándose en Dios. Gente que debe vivir en una ciudad que a veces es más proclive al infierno.

Necesito un respiro de arte, de sustancia... de algo más.